Marsha P. Johnson es muy importante en la historia de la lucha LGBT+, pues ella y Sylvia Rivera fueron 2 de las activistas trans que estuvieron en los disturbios del Stonewall Inn el 28 de junio de 1969.
Marsha P. Johnson (nacida el 24 de agosto de 1945 en Elizabeth, Nueva Jersey) es un pilar muy importante en la historia LGBT+, pues gracias a esta mujer y activista trans —quien era negra, trabajadora sexual y vivía con VIH—, hoy podemos celebrar el hecho de que existimos como una comunidad. Ella y Sylvia Rivera lucharon antes, durante y después de los disturbios de Stonewall y juntas fundaron STAR (Street Transgender Action Revolutionaries), organización dedicada a ayudar a personas de la comunidad LGBT+ en situación de calle.
Marsha P. Johnson es una de las figuras con las que deberíamos de estar agradecidos, pues, al igual que otras personalidades de la lucha de la liberación sexual, levantó la voz cuando pocos se atrevían a hacerlo. Ella y su amiga (también activista trans) Sylvia Rivera estuvieron en las primeras líneas de batalla en los disturbios del Stonewall Inn la madrugada del 28 de junio de 1969.
¿Quién fue Marsha P. Johnson?
Nació el 24 de agosto de 1945 en Elizabeth, Nueva Jersey. La infancia de Marsha no fue precisamente fácil, pues creció en un entorno sumamente religioso. En ese entonces, el concepto de ‘persona transgénero’ no era algo conocido y es por eso que Marsha P. Johnson se empezó a referir a sí misma como ‘drag queen‘.
Hoy sabemos que ser drag queen y trans no es lo mismo. Es más, la diferencia entre estos conceptos es abismal. El drag es una práctica, una expresión de género, mientras que ser trans tiene que ver con identidad de género. Hoy sabemos que Marsha P. Johnson era una mujer trans.
A esta revolucionaria activista por los derechos de la comunidad LGBT+ también se le ha conocido por ‘haber lanzado la primera piedra’ en los disturbios de Stonewall. Pero, contrario a lo que muchos creen, Marsha P. Johnson no fue la que desató los eventos de aquella noche. Ese honor le corresponde a Stormé DeLarverie, una lesbiana butch que, según ella y testigos presenciales, fue quien «encendió la chispa» de la revuelta. Pero Marsha sí inició una lucha. De hecho, ella fue de las primeras en levantar la voz ante las injusticias que las mujeres trans y la comunidad LGBT+ tenían que soportar. MIRA POR QUÉ SE CELEBRA EL ORGULLO EN JUNIO.
Antes de Stonewall
Mucho antes de los disturbios de Stonewall —conocidos por marcar un antes y un después en la lucha LGBT+— Marsha P. Johnson empezó a hacer grandes cambios a través de su activismo. Marsha vivió muchos años en las calles de Nueva York. No tenía hogar y esta fue una de las razones por las que recurrió al trabajo sexual para lograr sobrevivir. Con el paso de los años, Marsha empezó a ser reconocida en la vida nocturna de Nueva York, especialmente por sus atuendos drag que ella diseñaba y elaboraba.
Johnson se convirtió en un referente de la comunidad LGBT+ de NY. Es importante mencionar que, en ese entonces, las personas que pertenecían a la comunidad de la diversidad sexual tenían que esconderse. En su mayoría, los gays, lesbianas y personas trans solo podían ser ellos mismos en la penumbra de la noche.
Y muchos, al igual que Marsha, vivían en las calles. Pero para Marsha P. —que por cierto, ‘P’ significaba «Pay it no mind» (no hagas caso)—, ayudar a las personas era parte de su esencia. Y precisamente porque ella también la pasó muy mal se dedicó a hacerles la vida un poquito menos difícil a otras personas.
Santa Marsha, al servicio de la comunidad LGBT+
Marsha P. Johnson se convirtió en una fuente de apoyo a la que las personas con más necesidad recurrían. Ella, a pesar de tener sus propios problemas, nunca le negó ayuda a nadie. Al contrario, siempre hacía todo lo que estuviera en sus manos. La empezaron a llamar la santa de Christopher Street o, simplemente santa Marsha.
Junto con su amiga, Sylvia Rivera —también mujer trans—, comenzaron a liderar algunas protestas en las que exigían visibilización y un mejor trato a las personas de la diversidad sexual.
Marsha y Sylvia en Stonewall
Si algo sabemos con certeza es que Marsha P. Johnson y Sylvia Rivera eran mujeres fearless. Y juntas… ¡eran un equipo poderosísimo! Ya eran reconocidas por las múltiples protestas que organizaron y esta es una de las razones por las que muchos aseguran que ellas fueron las que desataron los disturbios del 28 de junio de 1969 en el Stonewall Inn. Pero no fue así. CONOCE MÁS ACERCA DE LOS DISTURBIOS DE STONEWALL.
Esa noche, Marsha y Sylvia se encontraban ‘enfiestando’ en otra parte de la ciudad, pero una vez que se enteraron de todo lo que estaba sucediendo en Greenwich Village corrieron a unirse a la batalla. Esta lucha duró alrededor de 3 días y, efectivamente, Marsha y Sylvia estuvieron presentes y en las primeras líneas de batalla.
De acuerdo con ella misma y muchos testigos que estuvieron presentes aquella noche, Stormé DeLarverie es el nombre de la lesbiana cuya lucha contra la Policía fue la chispa que encendió los disturbios de Stonewall. CONOCE AQUÍ LA HISTORIA DE STORMÉ DE LARVERIE, LA LESBIANA QUE PRENDIÓ LA MECHA EN STONEWALL.
Después de Stonewall, muchas cosas cambiaron. Esa noche y los días posteriores se convirtieron en un parteaguas para la lucha de los derechos de las personas LGBT+. Al año siguiente, en el aniversario del Stonewall uprising, se celebró la primera Marcha del Orgullo en Nueva York y, posteriormente, se empezó a llevar a cabo en otras partes del mundo.
Marsha P. Johnson después de Stonewall
Para la década de los 70, después de lo sucedido en Stonewall, Marsha Johnson no bajó la guardia, sino todo lo contrario. Se empezó a involucrar más en el activismo y encabezó muchos proyectos. Junto con Sylvia Rivera fundó STAR (Street Transgender Action Revolutionaries), una de las primeras ONG que exigieron los derechos civiles de las personas trans.
Durante los siguientes años, Marsha P. Johnson continuó organizando un sinfín de protestas para exigir reconocimiento e igualdad para la comunidad LGBT+, especialmente para las personas trans. A lo largo del resto de su vida, santa Marsha no hizo nada más que entregarse por completo a su lucha que, también resultó ser la lucha de muchísimas personas más.
La muerte y el legado de Marsha P. Johnson
La muerte de la activista Marsha P. Johnson fue terrible y, hasta la fecha, sigue siendo un misterio. El 6 de julio de 1992, el cuerpo —sin vida— de Marsha fue encontrado en el Río Hudson. Las autoridades declararon que se trató de un suicidio, pero las personas que conocían a Marsha están seguras de que no fue así. En 2002, la causa de muerte de Marsha se cambió a ‘indeterminada’, pero a pesar de que muchos de sus conocidos siguen luchando para que el caso y la investigación se vuelva a abrir, hasta la fecha no lo han logrado.
Si de algo no cabe duda, es de que Marsha P. Johnson fue una de las mujeres trans que se atrevieron a cambiar la historia. Hoy, santa Marsha es recordada como eso: una mujer que entregó su vida a los demás y que no tuvo miedo por luchar y levantar la voz para hacer que las personas LGBT+ fuéramos visibles. Gracias por todo, Marsha «Pay it no mind» Johnson. Gracias por tanto. CHECA ESTAS RAZONES PARA HONRAR A MARSHA P JOHNSON.
¿Ya conocías la historia de Marsha P. Johnson, una de las primeras mujeres trans en cambiar la historia LGBT+?
Con información de Biography y Stonewall Forever