La pandemia ha transformado muchas de nuestras costumbres de convivencia y sin darte cuenta podrías dar señales de ser un roomie tóxico.
Hay que ser sinceros, ser un buen roomie no es tan fácil como parece y en cualquier momento podrías dar señales de ser alguien tóxico sin siquiera notarlo.
En especial, la pandemia hizo que nuestras reglas de convivencia dieran un giro de 180 grados. Sobre todo porque no podemos salir de casa y estamos obligados a convivir un poquito más que antes.
Así que, si quieres ser considerado con tu roomie, dale una ojeada a estas señales para que no seas un compañero insufrible y odioso.
1. No sacas la basura ni lavas los trastes
Por alguna extraña razón, la basura y los trastes siempre son un problema entre roomies. Y también son el indicador más fuerte de que uno de ellos es tóxico.
Vamos a ser claros. Si eres de los que siempre exige que saquen la basura o que laven los trastes, en realidad no estás siendo un buen compañero. Todo el trabajo que hagan en el depa debe ser equitativo, no puedes exigir algo que tú no estás dando.
Lo mejor es abrir sus canales de comunicación y llegar a acuerdos de cómo quieren que funcione la distribución de las tareas de la casa, porque si no pueden haber más conflictos y seguro terminarás siendo el abusivo.

2. Aplicas la dictadura musical
Puedes pensar que Chromatica de Lady Gaga es el mejor disco de todos los tiempos y que vino a generar una revolución musical. Sin embargo, eso no significa que tu roomie piense igual e imponerle esta idea te puede volver tóxico.
Debes entender que no a todos nos gusta la misma música y que ponerla muy alto con bocinas puede interpretarse como un ataque contra tu roomie. Mejor pregúntale si le molesta tu música y en qué horarios podría ser menos incómodo para él. O ya, lo más fácil, ponte los audífonos y se acabó.

3. Dices que es tu depa
Esta es la prueba definitiva de que eres un roomie tóxico. Y es que si llegaste primero, incluso si el lugar tampoco es tuyo, puedes llegar a sentir cierto derecho de pertenencia. Es decir, crees que el depa es tuyo y los demás son tus inquilinos.
Sin embargo, el depa es de todos los que lo comparten, así que no deberías sentirte con derecho de más si todos pagan lo mismo. No te molestes si llegas y tu roomie está en la sala, también es suya y tiene todo el derecho de disfrutarla.

4. No respetas acuerdos en cuanto a las visitas
Este punto se volvió bastante sensible, en especial ahora que la pandemia nos obligó a estar encerrados en casa. Y es que para muchos la emergencia sanitaria no significó lo mismo.
Mientras muchos tomaron como ley marcial el no salir de casa o no invitar a gente para evitar contagios de covid, otros simplemente siguieron con su vida sin ningún reparo. Pero lo que muchos no se imaginaron es que su roomie no podría pensar igual y eso en definitiva es tóxico, sobre todo cuando se trata de una pandemia.
Lo mismo: la comunicación es esencial y respetar los acuerdos se vuelve fundamental para que todos en el depa se sientan cómodos.

5. Hablas sin parar
La pandemia nos afectó emocionalmente a todos. E incluso puede que el aislamiento te haya hecho sentir un poco solo. Por eso, recurrir a tu roomie para compañía suena como una solución natural y razonable.
Sin embargo, no todo el mundo está disponible todo el tiempo y hablar constantemente con tu compañero cuando este no quiere puede ser bastante tóxico.
También es muy natural que la gente quiera su espacio, aprende a respetarlo y saber cuándo se puede dar la convivencia y cuándo no. Lo único peor es bajarle el novio a tu roomie.
