Fue hasta 2018 cuando uno de los familiares de la reina Isabel II se declaró abiertamente LGBT+. Sin embargo, ha habido otros personajes gays en la familia real.
Dos doctores han sido suspendidos de sus labores luego de que removieron la vagina de un hombre trans a pesar de que este les había solicitado no hacerlo.
Una conductora de Uber les dijo a unos chicos gays: «No se besen, soy cristiana». La señora hizo este desatinado comentario a una pareja que iba en su auto.