La activista LGBT+ y atleta especialista en triple salto, Yulimar Rojas, es una de las ganadoras de la medalla de oro en los Juegos Olímpicos de Tokio 2020.
La atleta especialista en triple salto, bicampeona mundial y activista LGBT+, Yulimar Andrea Rojas Rodríguez (aka la Guerrera), representó a Venezuela en los Juegos Olímpicos de Tokio 2020 y ganó la medalla de oro en la especialidad de triple salto.
Durante su competencia el 1 de agosto de 2021 Yulimar Rojas también fue la deportista que marcó un nuevo récord mundial. Con una marca de 15.67 metros, superó el récord olímpico de 1995, que fue cortesía de la exatleta ucraniana Inessa Kravets. En caso de que no hayas podido ver la victoria de Yulimar, a continuación te dejamos el video:
A la par del reconocimiento de Yulimar Rojas como ganadora de la medalla de oro en los Juegos Olímpicos de Tokio 2020, en Puerto de la Cruz (Venezuela) se reunieron amistades y familiares para celebrar la victoria de la atleta. Desde la transmisión, los seres queridos de Yulimar repetían que tenían confianza en ella para convertirse en campeona olímpica. Lo consiguió.
Los Juegos Olímpicos de Tokio 2020 no son la primera vez en la que Rojas celebra un triunfo olímpico. Además de ser merecedora de la medalla de plata en las Olimpiadas de 2016 en la categoría de triple salto, Yulimar Rojas cuenta con las marcas récords en Venezuela. Asimismo, en los Juegos Panamericanos de 2019 logró que la World Athletics la reconociera como la poseedora del récord del mundo de triple salto en pista cubierta. Un año después recibió el título de la Mejor Atleta Femenina Mundial por parte de la misma institución.
¿Quién es Yulimar Rojas?
Originaria de Caracas, Yulimar Andrea Rojas Rodríguez nació el 21 de octubre de 1995. Al igual que muchas otras niñas que sueñan con representar a su país en campeonatos mundiales, Yulimar se interesó por los deportes desde muy pequeña. La atleta pasó su infancia en el poblado de Pozuelos. Tal y como lo expresó en una charla con el Olympic Channel, creció «en un seno familiar muy humilde». Con ella, son 7 hermanos. Le gustaba ir al cine, pasar las tardes en la playa y jugar a los videojuegos.
En ese entonces tenía un gran interés por el voleibol. Además de sentirse atraída por la elegancia y energía de este deporte, una de las razones por las que empezó a entrenar fue el vínculo afectivo con su padre. Las competencias de voleibol en los Juegos Olímpicos de Pekín 2008 fueron otro de los factores que la motivaron.
Aunque Rojas tuvo un cariño muy particular por el voleibol, le fue complicado entrenar de manera profesional, ya que el Instituto de Deportes del Estado Anzoátegui no contaba con coaches. Fue así como Yulimar Rojas tuvo su primer acercamiento con el atletismo. Tan pronto la vieron, los entrenadores se dieron cuenta de su potencial.
La promesa de Venezuela en las competencias de salto alto
Al cumplir 15 años, la atleta salió victoriosa de los XVIII Juegos Deportivos Nacionales de Venezuela. Ganó la prueba de salto de 1.70 metros. Uno de los eventos con los que se supo que Yulimar Rojas podría ser candidata para los Juegos Olímpicos fue el Campeonato Sudamericano Juvenil de Atletismo (2011). Su especialidad en el salto alto le otorgó la medalla de oro. La atleta y activista LGBT+ Yulimar Rojas volvió a ganar el oro en los X Juegos Suramericanos 3 años después. En 2015, los momentos de gloria continuaron para Yulimar, pues fue de las 47 deportistas que dio a Venezuela una medalla de oro. Para esas fechas, Yulimar ya se posicionaba como la mejor atleta de salto alto de su país.
Yulimar forma parte de la familia de Élite
Con esos eventos como antecedente, Yulimar Rojas empezó a centrar sus esfuerzos y sueños en clasificar para los Juegos Olímpicos. Fue así como se dispuso a buscar un entrenador. Después de un recorrido por los laberintos de Facebook, Yulimar logró contactar al multicampeón cubano Iván Pedroso. Tan pronto comenzaron a hablar por mensajes, Pedroso le propuso que se fuera a vivir a Guadalajara, España. A la fecha, ese es el lugar de residencia de la atleta y activista LGBT+ Yulimar Rojas.
En caso de que no lo recuerdes: Iván Pedroso —también conocido como Iván el temible o el saltamontes— ganó la medalla de oro en el Campeonato Mundial de Atletismo de 1995 (Suecia). Su mayor victoria fue recibir la medalla de oro después de su participación en los Juegos Olímpicos de Sídney (2000). Actualmente, el grupo integrado por Iván Pedroso, Yulimar Rojas, Nelson Évora —quien se coronó como campeón olímpico en el triple salto alto en las Olimpiadas de 2008— y las atletas Ana Peleteiro (España) y Nubia Soares (Brasil) recibe el nombre de la familia de Élite.
El camino que llevó a Yulimar Rojas a ganar la medalla de oro en los Juegos Olímpicos de Tokio 2020
Con 19 años de edad, Yulimar Rojas se mudó a España para entrenar al lado de Iván Pedroso. Sus esfuerzos rindieron frutos, pues además de lograr clasificar para los Juegos Olímpicos de Río de Janeiro (2016) fue ganadora de la medalla de plata en la competencia de triple salto. Este triunfo la posicionó como una de las superestrellas del deporte latinoamericano.
Para las competencias de Tokio 2020, las expectativas de Yulimar Rojas no cambiaron. Se convirtió en la primera venezolana en conseguir el oro olímpico. Al respecto, en una charla con Agence France-Presse Caracas en junio de 2021 la deportista sostuvo:
«El límite es el cielo. No me quiero limitar y decir hasta dónde puedo llegar. En Río de Janeiro era la novata. Estaba emocionada porque iba a competir contra grandes atletas e iba a representar a Venezuela. No dejo de estar emocionada y ansiosa. Pero sé que esta vez el oro olímpico me está esperando».
Yulimar Rojas, también conocida como la Guerrera
Al igual que Caster Semenya y Rut Castillo, Yulimar Rojas es una inspiración para las nuevas generaciones. De ahí que su apodo sea ‘la Guerrera’. Desde muy pequeña, Yulimar cree en los superhéroes. Las niñas y las infancias LGBT+ creen en ella. Yulimar Rojas estuvo en la misma posición que niñes que sueñan con portar un uniforme con la bandera de su país.
Se sentó a ver las competencias de los Juegos Olímpicos en la televisión y prometió que algún día estaría ahí. A la activista LGBT+ y atleta Yulimar no solo la hemos visto en las competencias. Algunas niñas la ven en el cómic del Comité Olímpico Internacional (COI). Chicas que —como la deportista— se abrazan como lesbianas se secan las lágrimas al ver que Yulimar promete cargar el oro bajo una mayor satisfacción: ser una superheroína que habla sobre los derechos LGBT+.
El mayor triunfo de la atleta
En cada entrevista, Yulimar se presenta como una deportista audaz. Al estar inscrita en un sistema racista, LGBTfóbico y patriarcal, Yulimar Rojas escoge a la Mujer Maravilla como un ejemplo a seguir. Aunque se reivindica como parte de la comunidad LGBT+, es muy reservada en su vida personal. No obstante, nunca ha silenciado su postura:
«Realmente me siento muy identificada. Me gusta que esta comunidad vea que hay personas que trabajan para consolidar el deporte lo más alto. Tengo una relación bastante bonita. Quiero que en mi país se pueda celebrar el amor entre personas del mismo sexo y que el trabajo que hago sea respetado».
Según expresó en una entrevista con el Olympic Channel, a lo largo de su carrera se ha enfrentado a comentarios y actitudes hostiles por ser latina, migrante y lesbiana. Sin embargo, la atleta no se muestra como una persona tímida. Ya lo dijo, su límite es el cielo. Las niñas e infancias LGBT+ necesitan saber que las mujeres de la diversidad sueñan, pelean y ganan.
«Más que ganar medallas, esta es mi mayor recompensa: dejar un mensaje positivo en ellas y en el mundo. Quiero que sepan que todo se puede lograr cuando trabajamos por lo que queremos. Todos somos campeones en nuestras vidas. Quiero que se caigan los muros. Que podamos volar, solas o juntas, pero volar hasta donde queramos estar».
¿Ya conocías a Yulimar Rojas, atleta, activista LGBT+ y ganadora de la medalla de oro en los Juegos Olímpicos de Tokio 202?
Con información de VTV, Olympics, As, El diario, Guinness World Records, Runner’s world, Medium, Distintas Latitudes, El Estímulo y AFP Caracas
