En 1947, una mujer recién casada inundó los titulares de Toronto, pues un triángulo amoroso gay pudo haber causado su muerte.
¿Cómo es que un triángulo amoroso gay puede causar la muerte de una novia recién casada?
Christina Mocon fue la protagonista de uno de los ‘crímenes’ más misteriosos. En 1947, su matrimonio con Jack Ray Kettlewell resultó en un desastre que involucró al ‘mejor amigo’ de John, Ronald Barrie.
Hasta ahora, aún no se sabe a ciencia cierta qué fue lo que definitivamente acabó con la vida de Christina, pero su leyenda continúa viva para asombrar a las nuevas generaciones.
Un matrimonio sospechoso
Christina vivía tranquilamente trabajando para un banco en Toronto, Canadá, y jamás imaginó que un triángulo amoroso gay sería la causa de su muerte.
En mayo de 1947, contrajo matrimonio con Jack Kettlewell, un veterano de guerra con el que llevaba saliendo cerca de 3 años.
Pasaron los primero días de su luna de miel en un apartamento en Toronto. Extrañamente, fueron acompañados por Ronald Barrie, quien era el ‘mejor amigo’ de Jack.
A varias personas les parecía inusual la enorme cantidad de tiempo que Ronald parecía pasar con la pareja y, de acuerdo con declaraciones de la familia de Christina, sospechaban que Barrie estaba enamorado de ella.
Días después mudaron su estadía a una cabaña que tenía Ronald en el bosque, únicamente accesible por bote, pues estaba rodeada por un lago.
Durante ese tiempo ambos reportaron que Christina se sentía triste y a veces lloraba a escondidas. Además, tuvo varias conversaciones con Ronald, expresando sus dudas sobre si su esposo verdaderamente la amaba.
Pocos días antes de volver, la cabaña se incendió repentinamente y Ronald solo pudo salvar a Jack, pues Christina no parecía estar en el interior de la casa. Horas después, el cuerpo de ella fue encontrado flotando sin vida en las inmediaciones del lago.
Las sospechas
¿Y dónde entra el triángulo amoroso gay que causó la muerte de Christina? Inicialmente, se sospechó que la víctima había cometido suicidio. Esto gracias a varias cartas que había escrito Christina a lo largo de su relación con Jack. CONOCE A LOS ASESINOS SERIALES QUE MATABAN HOMOSEXUALES.
No obstante, en estas mismas notas, se dejaba ver que a Christina le preocupaba la extraña y cercana relación que tenía su esposo con Ronald.
Fue entonces que se descubrió que Jack había sacado un seguro de vida para Christina. Curiosamente, el beneficiario de la póliza no era él, sino su ‘mejor amigo’ Ronald Barrie. Al mismo tiempo, Barrie tenía asegurada su cabaña y su beneficiario era Jack.
Tras ser interrogado por la policía, el viudo reveló que él y su mejor amigo tenían una relación amorosa desde hacía mucho tiempo. No obstante, en la Corte Jack negó haber hecho esa declaración y acusó a la autoridad de ponerle una trampa.
Además, ninguna evidencia pudo ser presentada por la Corte para validar la relación. Aun así, el abogado asesor C.P. Hope aseguró que ambos hombres eran amantes y que le jugaron sucio a Christina. ENTRA AQUÍ PARA LEER LA ATERRADORA HISTORIA DEL NARCOSATÁNICO BISEXUAL.
¿Final feliz?
Finalmente, nunca se pudo probar que este triángulo amoroso gay tuviera una relación directa con la muerte de Christina, por lo que nadie nunca fue arrestado bajo ningún cargo. CHECA LA VIDA DE ESTE SANGUINARIO NARCO GAY.
Al terminar el juicio, John decidió casarse con otra mujer tres años después de la tragedia y tuvo un par de hijos con ella. Sin embargo, Ronald no continuó a su lado en esta ocasión.
De acuerdo con declaraciones de varios de sus conocidos, Ronald decidió dejar Toronto luego de una pelea con Jack. Así, huyó a Nueva York y ambos jóvenes jamás volvieron a verse.
Aunque antes de partir, Ronald le regaló un cachorro a uno de los hijos de Jack, como símbolo de su cariño y para que no lo olvidara. LEE ESTA HISTORIA SOBRE LOS HUIPAS, ASESINOS SERIALES GAY.
Este triángulo amoroso gay pasará a la historia por haber protagonizado una de las muertes más misteriosas de la historia.
Con información de The Star y BuzzFeed Unsolved