La Fiscalía de Veracruz dejó fuera de las mesas de trabajo a los activistas LGBT+ que realizaron una huelga de hambre la semana pasada.
El pasado 3 de septiembre, nueve activistas que se mantenían en huelga de hambre por la impunidad en asesinatos de personas LGBT+ en México finalizaron su protesta tras lograr algunos acuerdos con la Secretaría de Gobernación (Segob) y la Fiscalía de Veracruz. La institución estatal se comprometió a realizar mesas de trabajo con los colectivos de la diversidad sexual y a ajustar el protocolo de diligencias básicas para investigar los crímenes cometidos en razón de la orientación sexual o identidad de género de las víctimas.
Sin embargo, bastó una semana para que la fiscalía rompiera su palabra. Jazz Bustamante, quien inició la huelga de hambre el pasado 27 de agosto, dijo en entrevista para Homosensual que las autoridades dejaron a los colectivos disidentes fuera de las mesas de trabajo. En cambio, la fiscalía solo invitó a las reuniones a organizaciones afines al gobernador Cuitláhuac García y a su partido, Morena.
Muchas fotos, pero nada de trabajo
De acuerdo con Jazz, las mesas de trabajo entre los activistas LGBT+ y la Fiscalía de Veracruz debieron iniciar el pasado martes. Sin embargo, la diputada de Morena, Mónica Robles, difundió audios asegurando que la reunión se aplazaría debido a que Jazz solicitaba carpetas de investigación de los casos de crímenes de odio en Veracruz.
Finalmente, cuando se realizó el encuentro, no se convocó a los activistas que realizaron la huelga de hambre la semana pasada:
«Se cambió la reunión del martes para el jueves. Supuestamente íbamos a ser convocadas y convocados todos los colectivos, entre ellas y ellos quienes estuvimos en huelga. Pero no nos convocaron a colectivos de otros municipios. Solamente convocaron a los de Xalapa, cercanos a Cuitláhuac».
Jazz también comenta que, además de excluir a algunos activistas LGBT+ de la reunión, la titular de la Fiscalía de Veracruz,, Verónica Hernández Giadáns, se limitó a tomarse una foto para subirla a la página de la institución y simular que está trabajando:
«La fiscal va solamente de entrada por salida. Va muy rápido a tomarse fotos con estas personas y a decir que tienen todo su apoyo. Pero no firma ningún acuerdo».
Nuevas protestas a la vista
Ante el incumplimiento de los compromisos por parte de las autoridades, colectivos y activistas LGBT+ contemplan la posibilidad de tomar las instalaciones de la Fiscalía de Veracruz. Por lo pronto, Jazz Bustamante comenta que ya se estableció interlocución con la Secretaría de Gobernación:
«Nos dijeron que hoy o a más tardar el lunes van a girar oficios para que le den seguimiento y que estemos todas y todos en las mesas».
Sin embargo, Jazz comenta que si no hay una respuesta pronto, podrían tomar la fiscalía. Otra opción es acudir a la ONU, que ya se ofreció para llevar la interlocución entre los activistas y las autoridades de Veracruz.
No es asunto partidista
A una semana de romper la huelga de hambre, Jazz comparte que su estado de salud es bueno. No tanto así su estado emocional. Le molesta que la Fiscalía de Veracruz no pueda cumplir con los acuerdos establecidos con los activistas LGBT+. Califica a las autoridades como reacias e incongruentes.
Además, considera como una falta de ética el hecho de partidizar el tema de los crímenes de odio:
«Deben dar respuesta a todos, no solamente a sus amigos y a los que no los van a cuestionar».