Si pensabas que lo no binario es del siglo XXI, te presentamos cinco identidades no binarias que surgieron de culturas ancestrales.
En los últimos años parece que a la comunidad LGBT+ se le agregan cada vez más letras. Y que tiene más orientaciones sexuales —pansexual, asexual y demisexual— o identidades de género —no binarias y lo genderfluid—.
Sin embargo, al escuchar alguno de estos nuevos términos, normalmente también surgen burlas y quejas hacia las nuevas generaciones. Ya sea por su «afán de crear nuevas etiquetas nomás porque sí» o por su obstinación a contrariar algo que por mucho tiempo el mundo occidental ha creído socialmente incuestionable: el género.
Aquí te mostramos 5 identidades no binarias que desde hace siglos han sido protegidas y celebradas dentro de cada una de las culturas donde surgieron.
Mahu (Hawaii)
Las personas mahu pertenecían a las culturas antiguas de Polinesia y Hawaii. Contenían un espíritu tanto masculino como femenino y no eran considerados ni hombres ni mujeres, sino como «un lugar en medio». Tomaban los roles sociales de cuidado, sanación y protección a través del hula y cantos tradicionales.
Los misioneros americanos que llegaron durante el siglo XIX consideraron esto una práctica inmoral. Los mahu entonces comenzaron a ser perseguidos para ser desterrados o asesinados. Su identidad, por otra parte, fue estigmatizada y prohibida a tal grado que hoy en día este término es usado en la isla de manera despectiva.

Quariwarmi (Perú)
Las personas consideradas quariwarmi en la cultura inca precolombina, por lo general asumían papeles de importancia espiritual dentro de sus comunidades. Las vestimentas que estos chamanes utilizaban representaban, en primer lugar, su posición en medio del género masculino y femenino. Igualmente, sus ropas manifestaban su lugar entre el presente y el pasado, así como entre los vivos y los muertos.
Poco se sabe sobre la aceptación y otros roles sociales que asumían las personas con esta identidad en tiempos antiguos. Además, hoy en día es muy raro encontrar a alguien que se siga denominando quariwarmi, aunque no imposible.

Two spirits (EE. UU. y Canadá)
De las identidades no binarias de nuestra lista, esta es la más conocida de todas. Es aceptada por aproximadamente 150 tribus distribuidas a lo largo de EE. UU. y Canadá, incluyendo la tribu navajo y la cherokee.
Si un integrante de la tribu mostraba interés en los roles y trabajos tradicionales del género opuesto, se realizaban rituales y celebraciones para decidir si en ella se contenían ambos espíritus: masculino y femenino. Aquellas personas que se nombraban two spirited (con dos espíritus) se consideraban poseedoras de un gran regalo y usualmente asumían roles de importancia espiritual dentro de sus tribus.

Lhamanas (EE. UU.)
Los lhamanas son parte de la cultura zuni, con residencia en los EE. UU. La apertura a las identidades de género no binarias en esta cultura existe desde sus mitos de creación. En ellos, una de las deidades más poderosas, Awonawilona, es una entidad tanto hombre como mujer. Su sociedad tiene una organización matrilineal y el género parece estar más apegado a los roles sociales que se desean llevar, que a las prácticas sexuales de cada persona (aunque no las excluye).
De pequeños, los niños y niñas de esta cultura son educados de igual manera. Llevan todos y todas el cabello corto durante la infancia. Es hasta la pubertad cuando comienzan a distinguirse como individuos por diferentes adornos y estilos de cabello. Durante esta etapa, los niños y los lhamanas son iniciados por igual en la sociedad kachina, dedicada a trabajos espirituales y de caza. Las lhamanas, por otra parte, comienzan a utilizar un vestido para indicar que buscan asumir las responsabilidades del hogar junto con el resto de las niñas.

Feminiello (Italia)
Los feminiellos surgieron en el siglo XVIII como parte de la cultura napolitana, en Italia. Eran hombres cuya expresión de género era femenina y que asumían las tareas del hogar y del cuidado de los niños. En la sociedad napolitana se consideraba que tener un feminiello dentro del hogar era buena suerte. Era una tradición que se le diera a un feminiello un bebé para sostener en brazos, además de que también se consideraban afortunados para juegos de azar como el bingo.

Estas son cinco de las tantas identidades no binarias que existen o existieron alrededor del mundo.
Y tú, ¿conoces algún otro pueblo que haya conservado la diversidad sexual por tantos años?
Con información de PBS, Refinery 29, Kumu Hina y Owlcation