Ser asexual y ver la serie Sex Education es una experiencia muy distinta a la que viven las personas con otras orientaciones sexuales. Así lo viví yo.
Hay más de una razón para ver la serie Sex Education. Las críticas especializadas y las reacciones en internet parecieran indicarnos que hay un consenso sobre el impacto que esa serie británica está teniendo hoy día, sobre todo entre la población LGBT+.
Pero no es mi intención escribir aquí una reseña para convencer futuras audiencias, sino para contar por qué como asexual me costó verla. Y lo que significa ver la asexualidad representada en el discreto personaje de Florence (interpretado por Mirren Mack). Y SÍ: este artículo incluye algunos spoilers al final.
Aún hay poca representación asexual en series y películas
Las personas asexuales crecemos rodeadas de representaciones narrativas alosexuales. Es decir, el extremo contrario de la asexualidad reflejado en el deseo constante y vívido por tener relaciones sexuales. CHECA ESTOS 5 DATOS QUE DEBES SABER SOBRE LA ASEXUALIDAD.
La alonormatividad se ha impuesto a través de dos discursos espejos: debes sentir culpa por tener deseo sexual o debes sentir culpa por no tener deseo sexual. Aunque opuestos, ambos mensajes parten de la misma premisa: lo ‘normal’ es que las relaciones sexuales sean el centro de nuestra vida y de nuestras emociones.
Conforme el sexo dejó de ser un tabú en series y películas, las historias pasaron a ser expresamente alonormativas. Los personajes miden su éxito emocional, social e incluso político a partir del desarrollo de su sexualidad. Por otro lado, la escasez o la ausencia absoluta de estas experiencias son representadas como símbolos de inestabilidad, insuficiencia, problemas no resueltos y frustración.
Ojo: ‘asexual’ de ninguna manera es sinónimo de ‘anormal’
La serie Friends no solo plantea lo ‘anormal’ de no tener sexo durante dos meses, sino que lo utiliza como pretexto para burlarse del personaje Ross, como un eslabón más en su reiterada mala suerte.
Asimismo, la serie Grey’s Anatomy ha realizado breves acercamientos a la asexualidad de manera fallida, reforzando estereotipos discriminatorios. Por ejemplo, en un episodio en el que una pareja asexual resulta no serlo. La esposa tenía un tumor cerebral que le «impedía sentir» y el esposo solo fingía para ella. O el personaje de Varys en Game of Thrones que además de asexual es eunuco.
Es por eso que ver Sex Education puede ser complicado para una persona asexual. Y no por un rechazo a las experiencias e inquietudes de las personas que no son asexuales —espero sea una aclaración innecesaria—, sino porque a primera vista pareciera ser una serie sumamente alonormativa.
El placer sexual está en cada esquina, detrás de cada conversación o conflicto entre los personajes, e incluso sutilmente entre los extras en algunas escenas. Por supuesto que esto no debiera tampoco sorprender. La serie se llama precisamente Sex Education, por lo que no podría esperarse menos. ESTAS SON 5 FIGURAS HISTÓRICAS QUE NO SABÍAS QUE ERAN ASEXUALES.
Ver la serie Sex Education me hizo recordar inquietudes y conflictos durante la adolescencia
En mi experiencia personal, la serie me trasladó nuevamente al ambiente de secundaria en el cual uno no logra conectarse con los principales planteamientos que rodean la trama. ¿Dónde está el resto de la vida? ¿Dónde está aquello que llena el todo cuando no se habla del sexo?
Estas cuestiones no son menores cuando pienso en las personas asexuales que verían la serie. Sobre todo aquellas que no saben o no han aceptado que lo son. Sobre todo aquellas en etapas tan complejas como la adolescencia.
Puedo imaginarme el sentimiento que en mí generaron películas como American Pie, en las cuales se presentaba un mundo tan alosexual y que recibían tanta popularidad como atención mediática, que me convencía de que el sexo debía ser una prioridad así me pareciera prescindible.
Cada experiencia de cada diversidad de la comunidad LGBT+ es distinta. Por eso entiendo que pueda costar imaginar lo que las representaciones alonormativas pueden generar en el proceso de las personas asexuales. No es un tema de culpas o satanizar esas representaciones, pero sí plantear la posibilidad nuevas narrativas, en las cuales se reconozca que igual existen otras formas de relacionarse con el mundo. MIRA ESTAS FOTOS SEXIS DE CONNOR SWINDELLS, ACTOR DE SEX EDUCATION.
Florence, el personaje asexual de la serie Sex Education
Y es ahí cuando Sex Education da un giro inesperado en su segunda temporada, acaparando por fin la atención de la comunidad asexual. El personaje de Florence no forma parte del elenco principal. Aparece apenas en cuatro capítulos. Sin embargo, sus breves apariciones plantean de manera muy general pero certera lo que implica ser asexual en la escuela. Así como los cuestionamientos y ‘consejos’ que en algún momento recibimos durante nuestro proceso.
La escena clímax es cuando Florence, en un quiebre, acude a la oficina de la Dra. Milburn (en la como siempre excelente actuación de Gillian Anderson) para entender por qué no quería tener sexo nunca.
Al entrar, la alumna le manifiesta con dolorosa desesperación: «No quiero tener sexo para nada. Nunca, con nadie. Creo que quizá estoy rota/averiada».
La terapeuta sexual, después de explicarle lo que es la asexualidad, remata con una frase poderosa:
«La sexualidad es fluida. El sexo no es todo lo que somos, ¿entonces por qué habrías de estar rota/averiada? (Sex doesn’t make us whole, so how could you possibly be broken?)».
-Doctora Milburn (Sex Education)
La Dra. Milburn es la personificación del culto y la fascinación por el sexo en la serie. Se dedica a su estudio, análisis y diagnóstico. Habla de él sin filtros, incomodando incluso a personas que debieran estar ya acostumbradas a sus comentarios.
Podría pensarse que, de todo el elenco, sería la última persona en comprender y en empatizar con un personaje que rehúye del tema principal de la serie. Pero no es así. La escena funciona como un poderosísimo abrazo simbólico de la historia en el que se le da la bienvenida a la realidad asexual dentro de la diversidad sexual en el mundo de Sex Education.
Sí, es un personaje sumamente secundario. Sí, esperaríamos un papel más protagónico para explorar las complejas dinámicas de la adolescencia asexual que al exterior podrían parecer hasta inexistentes. Pero creo que la fugaz representación hace justicia. Quizá tardía dentro del desarrollo de la serie, pero la hace desde la comprensión y no desde prejuicios. HAZ ESTE QUIZ Y AVERIGUA SI SERÍAS LA PAREJA IDEAL PARA UNA PERSONA ASEXUAL.
Me preocupa un poco, eso sí, el aparente vínculo de la personalidad humorosa de Florence con su asexualidad.
En muchos espacios se nos ha entendido como personas iracundas o fácilmente irritables por ‘mal cogidas/no cogidas’. Pero en Sex Education es un vínculo no tan claro y que pudiera más bien plantearse como producto del miedo y de la inseguridad que genera no saber que se es asexual. Incluso podemos ver un cambio en el carácter de Florence justo después de salir de su conversación con la doctora Milburn.
En lo personal, si he de elegir una representación de la comunidad asexual en la ficción televisiva, me quedo con Todd Chavez de BoJack Horseman. Pero creo que Florence tiene un puntual aporte para hacer visible nuestra realidad como parte de ese abanico de posibilidades que es la existencia de un ser humano. De ahí que muchas personas asexuales han celebrado esa escena en redes sociales. No pocos incluso señalando haber llorado al verla.
Y ese es el poder de la representación en la cultura popular: podrá parecer irrelevante y efímera para quienes no son representados, pero reparador para quienes, al menos por un segundo, se dejan de sentir invisibles.
Si aún no has visto Sex Education, aquí el tráiler de la primera temporada.
