jueves, abril 25, 2024

Detecta si eres de las personas que hacen body shaming

El body shaming dentro de la comunidad LGBT+ está a la orden del día. Esto necesita cambiar YA.

Se le conoce como body shaming a la acción o práctica de avergonzar o humillar a una persona por la forma o el tamaño de su cuerpo. El body shaming es un tipo de bullying que puede ocasionar un trauma emocional severo y, desafortunadamente, es un tema muy común dentro y fuera de la comunidad LGBT+.

El body shaming puede venir de cualquier persona, incluso de alguien cercano. Pero también de parte de los medios. De hecho, los medios y la industria del entretenimiento son los principales causantes del señalamiento a los cuerpos diversos, pues llevan toda una vida mostrando una imagen de belleza que no es precisamente real o siquiera alcanzable.

Tristemente, el body shaming también puede venir de nosotros mismos, pues ante la expectativas de lo que la sociedad percibe como ‘el cuerpo perfecto’, nunca estaremos a la altura. Criticamos nuestro propio cuerpo cuando los demás nos señalan cosas que ‘podríamos mejorar’ o cuando nos comparamos con otros. Y lo peor de todo es que, ante los ojos de la sociedad en la que vivimos, no importa lo que hagamos… jamás será suficiente.

Body Shaming
Todos los cuerpos son hermosos, alto al body shaming. / Foto: Change The Future

(Falsos) estándares de belleza en la comunidad LGBT+

No es ningún secreto que la comunidad LGBT+ también ha sido víctima de lo que se supone que es el ‘cuerpo perfecto’. Los hombres gays, sobre todo, tienen la barra muy alta debido a los estereotipos que dicen que los gays tienen que ser musculosos y vestirse de cierta manera. ¿Y luego nos preguntamos por qué los hombres LGBT+ se vuelcan a la cirugía plástica? He aquí la respuesta.

El body shaming también se vive en las apps de ligue, donde hay quienes dejan muy claro en sus perfiles que «no gordos», «no femeninos», «no morenos» y ‘NO’ a un sinfín de características físicas. Si has llegado a señalar la apariencia física de alguien más cuando está frente a ti o a sus espaldas… has hecho body shaming.

Ejemplos claros de body shaming en la comunidad LGBT+

Un ejemplo muy claro de body shaming es el caso de la modelo trans Jari Jones. Por primera vez en la historia, una modelo trans fue la protagonista de una campaña del Pride (2020) de Calvin Klein… pero eso pasó a segundo término en el momento en el que empezó a recibir críticas por ser una modelo plus size. Una modelo de talla grande, trans y afroamericana… una combinación letal ante los ojos de los que tienen otra concepción de ‘belleza’.

body shaming Jari Jones
Jari Jones despertó el body shaming y la transfobia del público cuando protagonizó una campaña de Calvin Klein. / Foto: Twitter

Otro ejemplo de body shaming es cuando el stylist mexicano, Aldo Rendón, estuvo como juez de La más draga. Tras su participación en el show, lo acusaron de hacerle body shaming a varias de las concursantes, en especial a Iviza Lioza y Rudy Reyes. Aldo insinuó que ambas drag queens estaban pasadas de peso.

«El reto también era descubrir algo, se tenían que arrancar el vestido. Y tú cuando te arrancaste el vestido descansaste y sacaste la panza, casi me muero. Empecé a gritar: “Métela”».

—Crítica de Aldo Rendón a Iviza Lioza en La más draga

«Me cagó que te quitaras el vestido… yo nada más le veía la panza y decía: “Güey, o sea, se ve panzona».

—Crítica de Aldo Rendón a Rudy Reyes en La más draga

No, hacer que alguien se avergüence de su cuerpo no está bien

Burlarse de alguien por su apariencia física no está bien. Porque, sin importar cómo se manifieste el body shaming, a menudo lleva a la comparación y la vergüenza. Esto perpetúa la idea de que las personas deben ser juzgadas principalmente por sus características físicas. Los comentarios negativos acerca del cuerpo de alguien pueden llevar a la persona a involucrarse en comportamientos que no son sanos con el objetivo de cambiar su cuerpo a toda costa.

A pesar de que el body shaming no es algo nuevo, el internet ha jugado un papel muy importante en el aumento de este tipo de bullying. Y, aunque muchos creen que a las palabras se las lleva el viento, es un hecho que humillar a alguien por sus características corporales puede tener un impacto severo en la salud mental de las personas.

El body shaming puede volverse un círculo vicioso de prejuicios y críticas externas e internas. Una vez que nos demos cuenta de nuestros propios comportamientos al hacer body shaming, podemos ayudar a contagiar a otros de body positivity.

Body shaming… not cool. Piensa dos veces —o tres— antes de hablar.

Con información de Healthline, ANAD y Vice

Ana Sierra Arzuffi
Ana Sierra Arzuffi
Escribí un libro. Hago de todo y si no sé hacerlo, lo aprendo. Mi animal favorito es la capibara, que es como un cuyo gigante <3. También tatúo, dibujo, esculpo, cuento historias, tengo un blog de Salud Mental. Les digo, hago de todo. Odio las pasas y tomo demasiado café.

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